La marcha de Nacho Escolar de la dirección del diario Público y el cierre de contenidos propios en ADN.es, una interesante web que puso en funcionamiento Juan Varela en el 2007, han generado una serie de artículos que cuestionan el buen trabajo de estos dos periodistas y también bloggers. Unos hablan de la crisis de la "generación blog" y otros más malintencionados en el desarrollo de la noticia se hacen la pregunta: ¿Se desinfla la burbuja de los gurús del periodismo 2.0? En ambas informaciones se destila cierto desprecio y risitas de fondo hacia el esforzado trabajo de ambos profesionales y sus jóvenes plantillas, que han demostrado que se pudo poner en marcha otro periódico en el abultado mapa informativo madrileño y que haciendo bien las cosas una edición digital puede aportar periodismo de verdad. Se denota algo en lo que he pensado muchas veces y que ayer le encontré un calificativo exacto en un interesante e inquieto foro en Internet. Hablo de la Generación Tapón, esa que en tantos sectores profesionales tapona y ningunea a los más jóvenes y mileuristas de sus plantillas para proteger sus cotizados altos cargos. Esos que detestan desde la ignorancia cualquier innovación, esos que nunca escuchan, esos que hacen oídos sordos cuando suena el tópico de "renovarse o morir". Esos que echan pestes hacia Internet y los nuevos medios sociales desde su absoluta ignorancia y que se traduce en un temor supino hacia algo que no quieren aprender. ¿Para qué? Desde sus despachos y sus automóviles "full equip" no tienen por qué hacer caso a los niñatos y listillos que pululan por sus empresas. Ni 2.0 ni 3.0 ni leches enteras o desnatadas.
Los miembros que impulsan esa Generación Tapón están en todas partes. En la política, en el periodismo, en la banca, en la judicatura, en la sanidad, en la universidad, en la industria, en todo tipo de sectores económicos... es una generación que se aferra al poder de forma increíble y no deja dar un paso a las generaciones siguientes, que están quedando muy desaprovechadas. Y cuando los más jóvenes y sobradamente preparados dan pasos firmes y tropiezan --ojo, un riesgo necesario para triunfar-- viene la carcajada por lo bajinis y el "ya te decía yo que estos niñatos se la iban a dar". Pues que sepan que los dos protagonistas de esta historia resurgirán cuanto antes con nuevos proyectos mediáticos --quizá en alguno conjunto-- que acabarán cuajando por pura lógica. El tsumani y la reprogramación existencial que están padeciendo ahora mismo tantos medios tradicionales en Estados Unidos está a un paso de entrar en la Vieja Europa y en los próximos años se instalará con forceps en nuestros temblorosos consejos de administración.
Lo apuntaba muy bien un periodista en ese foro que ha inspirado este post: "Yo veo un montón de gente de mucho nivel que anda por mi edad o un poco más y que está completamente desaprovechada mientras gente bastante mediocre sigue afianzada en puestos que si no llega a ser porque estaban en la transición adecuada, en la década adecuada, nunca hubieran soñado en ocupar". Más claro el agua. Y el que se dé por aludido, pues ya sabe a qué generación pertenece.
Los miembros que impulsan esa Generación Tapón están en todas partes. En la política, en el periodismo, en la banca, en la judicatura, en la sanidad, en la universidad, en la industria, en todo tipo de sectores económicos... es una generación que se aferra al poder de forma increíble y no deja dar un paso a las generaciones siguientes, que están quedando muy desaprovechadas. Y cuando los más jóvenes y sobradamente preparados dan pasos firmes y tropiezan --ojo, un riesgo necesario para triunfar-- viene la carcajada por lo bajinis y el "ya te decía yo que estos niñatos se la iban a dar". Pues que sepan que los dos protagonistas de esta historia resurgirán cuanto antes con nuevos proyectos mediáticos --quizá en alguno conjunto-- que acabarán cuajando por pura lógica. El tsumani y la reprogramación existencial que están padeciendo ahora mismo tantos medios tradicionales en Estados Unidos está a un paso de entrar en la Vieja Europa y en los próximos años se instalará con forceps en nuestros temblorosos consejos de administración.
Lo apuntaba muy bien un periodista en ese foro que ha inspirado este post: "Yo veo un montón de gente de mucho nivel que anda por mi edad o un poco más y que está completamente desaprovechada mientras gente bastante mediocre sigue afianzada en puestos que si no llega a ser porque estaban en la transición adecuada, en la década adecuada, nunca hubieran soñado en ocupar". Más claro el agua. Y el que se dé por aludido, pues ya sabe a qué generación pertenece.
Gran post Nacho. Gracias por no resistirte :-)
ResponderEliminarGracias Javier, necesitaba escribirlo porque es un problemón que sufrimos los que escuchamos tantas veces a los escoceses Simple Minds. Qué tiempos! :-)
ResponderEliminarGenial Nacho, este es un tema que debería comenzar a discutirse públicamente ya, porque a estas alturas es lamentable que el corcho del tapón siga engordando, guardando el vino sólo para sí. Hace casi un año, justo antes de las elecciones, escribí un post similar pero ceñido a los jóvenes emprendedores, y en donde la 'generación tapón' también juega su papel: http://www.paullop.es/2008/02/29/zapatillas-para-los-jovenes/
ResponderEliminarUn abrazo,
pau.
Creo que no deberías circunscribirlo únicamente al periodismo.
ResponderEliminarLo que hablas pasa en todas las profesiones y nuestra generación está cada vez más frustrada. Nos tocó empezar en el mundo laboral con una crisis ('90s) y cuando parecía que empezábamos a pisar con pie firme... ¡zas!, otra crisis...
Un beso y enhorabuena por el post.
Totalmente de acuerdo, de las élites tapón hablábamos en nuestro blog ya en 2005 ramon sangüesa y yo.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo. Ahora bien, esto es una buena descripción de lo que hay; tal vez sea el momento de cambiarlo. Se puede criticar a la generación precedente, pero no puedo acusarla de no "quitarse de en medio", nos joda o no, esta en su derecho. Creo que nos toca abrirnos paso a nosotros y reflexionar sobre porqué no lo estamos consiguiendo. ¿Miedos?, ¿insolidaridades?, ¿individualismo? ¿Pereza?. La respuesta la tenemos delante es nuestra.
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Pero coincido con Maripuchi, en que no es un caso aislado en el periodismo, sino en todos los campos
ResponderEliminarMaripuchi y PMM, leed bien el arranque del segundo párrafo: "Los miembros que impulsan esa Generación Tapón están en todas partes. En la política, en el periodismo, en la banca, en la judicatura, en la sanidad, en la universidad, en la industria, en todo tipo de sectores económicos"...
ResponderEliminarSi centro el tema en el periodismo es porque hay dos claros ejemplos de los últimos días, aunque está claro que lo de la Generación Tapón se extiende a todo tipo de actividad económica.
Me alegro que os guste el post, porque es de esos que uno escribe con el corazón y con cierta rabia contenida, que son dos circunstancias óptimas para que despierte el interés general.
Que siga esta conversación y saludos a todos.
Alguno de los que maneja Menéame debería "menear" este estupendo post para que lo lea mucha más gente.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarGran artículo Nacho. Creo que habría que popularizar la definición de "Generación Tapón" tanto como la de "Mileuristas", porque los segundos son en buena parte producto y herencia de los primeros.
ResponderEliminarP.D.- He intentado "menear" la noticia, pero me indica URL erróneo o no permitido por envío con varios clones
Me ha encatado es agradable darse cuenta de que uno no está sólo.
ResponderEliminarGracias
En respuesta a surco: Creo que uno de los problemas es que mucha gente vive muy bien dándole lo que quiere a la generación tapón y ni siquiera dejan que otros nos arriesguemos, no sea que eso les complique la vida.
ResponderEliminarUn análisis certero y valiente, Nacho, que suscribimos los hijos del famoso "baby boom". Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarBuen artículo Nacho, pero, lamentablemente me recuerda mucho, mucho a lo que ocurrió con aquella..., cómo se llamaba, si, la burbuja.com en aquel momento surgieron decenas de grandes proyectos que también contrataron a decenas de grandes periodistas (recuerdo que por aquel entonces los contrataban en portales tipo terra, ya y demás).
ResponderEliminarHoy en día son solo un recuerdo.
La crisis, desde luego es el gran detonante de estos cierres y despidos, pero tal vez sea que el proyecto no era tan bueno como pintaba.
Y también hay que entender a los que ponen la pasta intenten cortar sus gastos por la parte más arriesgada.
Por cierto, me olvidé de decir una cosa. Ahora me alegro mucho de que un amigo de mi barrio no haya sido tentado a irse a un proyecto 2.0 a Madrid, arrastrando con él a su mujer y sus dos hijos. No podría imaginarme su situación ahora en pleno inicio de la crisis y con un difícil retorno.
ResponderEliminarReflexionemos sobre esto.
Hola, Nacho.
ResponderEliminarExcelente post, que describe a la perfección lo que ocurre (como bien señalas) en todos los ámbitos.
Y es que, ya se sabe, no hay nada peor que un inútil "con mando en plaza".
Enhorabuena (y nos seguimos leyendo)
Salu2
Paco Barranco
#13. Créeme se de que hablas. Aún así hay que intentarlo siempre. La vivencia curte.
ResponderEliminarPuede que tengas razón Nacho, que la tengais todos vosotros, pero creo que ante estas cosas sean mala suerte, decisiones menos acertadas o enfoques erróneos, creo que hay que detenerse también a hacer un poco de autocrítica. No todo lo que habá es malo ni es bueno todo lo que está por venir.
ResponderEliminarDe todas formas, ehorabuena por tu post y por el blog!!!
Voy a dejar este post en primer lugar y no voy a escribir nada hoy por dos motivos fundamentales. Porque tengo sueño y no ando precisamente inspirado y porque veo que este tema puede generar más debate en las próximas horas (¿días?), independientemente de si alguien lo menea o no.
ResponderEliminarXotengo, aunque no hubiese burbuja.com, la Generación Tapón seguiria ahí, atornillada a sus poltronas y olvidándose de que ellos alcanzaron sus cotizados puestos cuando rondaban los 40 años. Paciencia pues y gracias a todos por vuestros comentarios. Da gusto ver que realmente somos una Generación Acción. Ya llegará nuestro turno :-)
Antes de recoger, saludos a todos!!
Estupendo el post, la música y el blog. Nacho, me has alegrado la noche y mañana volveré a leer y escuchar esto que compensa mucho. Lo rebotaré por email porque se de mucha gente que le va a gustar bastante. Salu2
ResponderEliminarLo de "Generación Tapón" es un concepto que está en el aire desde hace ya mucho tiempo. Alguien enlazaba a una referencia propia de 2005. Yo también tengo la mía propia, Hay que entender ciertas cosas de la Transición para entender cómo nació la "Generación Tapón"
ResponderEliminarCreo que no está bien decir que un artículo cuestiona la profesionalidad de alguien cuando en realidad expone el hecho de que precisamente dos proyectos jóvenes hayan sido los primeros en caer, cuando los tradicionales están en crisis.
ResponderEliminarEstá mal manipular las cosas y explicar algo cuando no las has entendido. Aquí nadie se ha molestado en leer si es cierto que esos artículos cuestionan el periodismo 2.0.
Excelente análisis, Nacho. En mi variopinta trayectoria profesional he ido encontrándome a esas alimañas de la generación tapón. A diferencia de algún otro lector, no soy tan compasivo con ellos. Envidiosos, ratas de cloaca que no dejan crecer a jóvenes más preparados que ellos por miedo a perder su puesto; o por miedo a tener que trabajar con nuevas ideas, dedicar tiempo...les puede la pereza y la rutina. Tengo un puñado de ejemplos, con nombres y apellidos, que servidor ha conocido en empresas reputadas conocidas por todos. Por tanto: sí existe esa generación tapón y sí existen directores generales y Presidentes y mandamases que consienten esta situación y conviven normalmente con estas sabandijas. Son parte del sistema. Ya les va bien. Tampoco están para grandes experimentos.
ResponderEliminarSin embargo, comparto con el lector "surco" que no podemos escudarnos en la generación tapón para no sacar adelante nuestro proyecto personal/profesional. Bien cortos serían nuestros sueños y débiles nuestras voluntades si permitiéramos que unos indeseables nos cortaran las alas.
Termino esta rolliza consideración filosófico-vital. En cuanto a los medios: leía hace poco, de Adrián Segovia (blog "audiencias") que "todo lo que nace grande nace muerto" (algo así). ADN.es, por ejemplo, empezó a lo grande. Y luego no ha recuperado la mega-inversión (redacción propia con 40 periodistas, etc.etc.). Quizás es mejor empezar humilde, pequeñito, y crecer porque adquieres tamaño a fuerza de dar valor a tu usuario (a tu cliente) y no solo a fuerza de capital.
La crisis de los medios no tiene nada que ver con una supuesta crisis de los blogs, del 2.0 en general ni ná de ná. Los medios viven de la publicidad, cara, y las empresas se están apretando el cinturón...y hay demasiados medios muy parecidos, sin valor añadido...y en España no se aplica el modelo de convergencia (los medios tienen redacción digital y redacción papel, doble gasto).....quizás van por ahí los tiros.
ES un mal generalizado... me temo q no solo en el periodismo. Conozco ONGDs en la que algunos de los directivos son mas homófobos y racistas que la propia población en general a la que los técnicos queremos sensibilizar.... hay que hacer limpieza pero algunos como dices, están demasiado cómodos en sus sillones y sueldos como para bajarse de su dorado trono y volver a mirar desde el suelo.
ResponderEliminarUn saludo
derribandomuros
Como el resto de los lectores te felicito. Has dado en el clavo.
ResponderEliminarPor una parte, es de agradecer que valores el trabajo de colegas/competidores como Nacho Escolar y Juan Varela. Dice mucho de tí que aprecies el trabajo ajeno.
Por otra parte, no sólo tú percibes ese tapón. Pertenezco a la generación de los 70 y, al borde de los 40, veo muchos de 50 apalancados y cómodos en su sofá. Pelearon hace años y ahora viven de esos laureles en un mundo que ha cambiado mucho. De hecho, son los primeros en animarte a leer "¿Quién se ha llevado mi queso?" para que entiendas el cambio mientras ellos se ponen hasta arriba de Camembert.
Quizá debieras darle más profundidad a este post. Te lo agradeceríamos.